#ElPerúQueQueremos

Resortes Sociales

Publicado: 2011-10-01

¿Nuestra sociedad está tan agitada como parece? ¿Vivimos una catástrofe nacional? ¿Han tomado los malos la nación por asalto? ¿Cuál es la exacta dimensión de la inseguridad y la violencia en nuestro país? ¿Cuál el porcentaje de delincuentes y violentos? ¿De corruptos? ¿Son tantos que no podemos hacer nada? 

Parece que todavía vivimos en una sociedad sin normas, donde cada quien hace lo que quiere y abusa cuando puede. Hugo Neira puso en el tapete, allá por los ochenta, el término anomia. Era el primer gobierno de Alan García. Veintitantos años después, y cuando aún estamos bajo la influencia del segundo gobierno de García, la percepción ciudadana es similar. 

A los mil días del gobierno de García escribí: “En estos mil días nada importante ha pasado. Este segundo período con el Apra en el manejo del Estado viene siendo anodino. Lo que es igual a decir que el Perú ha retrocedido. Porque en verdad, institucionalmente hemos retrocedido: hoy tenemos menos instituciones sanas en el Estado, no se ha hecho ninguna mejora organizacional en él y la sociedad peruana como sociedad no ha avanzado nada, está nuevamente podrida y sin resortes. Anomia. Alanomia”. (http://2mil32.lamula.pe/2009/04/19/)  

Sigo pensando lo mismo. El segundo gobierno aprista abandonó la sociedad y la institucionalidad estatal. Fue bueno para los negocios, pero no se puede dejar todo abandonado al poder del dinero. Sin embargo, no estamos, por supuesto, viviendo la terrible realidad de los ochenta y, por tanto, no deberíamos dejarnos llevar por la histeria colectiva porque ella nos llevará directo a un gobierno autoritario. Lo que tenemos que hacer es reconstruir instituciones. O, la verdad, construirlas de cara al siglo 21. Y construir sociedad.

No funcionan ni la Policía ni el Poder Judicial y, muchas veces, tampoco el Serenazgo. Tampoco funcionan nuestro sistema educativo ni el de salud. Es decir, lo que tenemos está a una distancia enorme de satisfacer a los usuarios. Tampoco funciona nuestro transporte.

¿Funcionan las familias? ¿Estamos haciendo bien nuestro trabajo como padres? En un porcentaje importante, el trabajo formativo de papás y mamás está siendo muy malo.

¿Funcionan nuestras organizaciones sociales? ¿La administración del edificio, la junta de administración del mercado, la asociación de padres de familia? Tampoco.

¿Nuestros medios de comunicación contribuyen a la reflexión colectiva y a generar una cultura más armónica? No, por rating y ventas, las más de las veces exacerban el escándalo, echan más leña al fuego y promueven la histeria.

Los espantosos sucesos del estadio Monumental han removido nuestro país como un terremoto. No será la última vez. Nuestra sociedad y nuestras instituciones están muy débiles. Solo nos queda trabajar intensamente y con cabeza fría. En democracia.

Los buenos somos más que los malos, pero los malos nos han tenido arrinconados. Es hora de reaccionar. Calmarnos. Dejar de destruirnos los unos a los otros. Guardar los adjetivos. Vacunarnos contra el virus de “yo hago lo que me da la gana”.

El ser humano es un sujeto social. En el Perú, nos olvidamos de eso y pretendemos hacer valer exclusivamente nuestros derechos individuales y de corto plazo. Es hora de cambiar.


Escrito por

Juan Infante

Sociólogo. Experto en temas de desarrollo económico y solución de conflictos. Consultor de empresas. Formador de empresarios.


Publicado en

2032

500 años después del encuentro entre los ejércitos de Atahualpa y Pizarro. Motivo más que suficiente para que todos nuestros traumas estén superados. Terminemos de construir nuestro país. Nos quedan 23 años.